El pasaje comenzó con Mecha usando un collar parecido al del escándalo de Moria Casán en Paraguay. Dijo que era el auténtico y que se lo había regalado la duquesa de Alba.
Todo transcurría de manera muy divertida pero Marcelo necesitaba presentar a Feudale y Gasalla luego de esperar varias horas para entrar no se quedó callado.
“¿Me está echando, ahora?. Yo acabo de esperar dos horas y media parada en una corriente de aire”, dijo Mecha.
Y luego el reclamo fue mayor: “Yo tengo palabra Marcelo, vivo en Europa. Acá ustedes dicen una cosa, hacen otra. Ahora va a entrar la Feudale, después entra otro. Yo te adoro, eh . Yo acepto a la gente como es, con su personalidad. Sea una buena persona, sea una mierda, yo lo acepto igual“
La situación no fue tan divertida para Marcelo, quien respondió: “Entro en el primer grupo, gracias”, y el conductor despidió al personaje con un “Chau Mecha, ¡que le prendan las luces en Ezeiza!”.
