El hecho ocurrió alrededor de las 23 horas del día domingo, cuando era montada por Juan Cruz Córdoba, quien competía en representación de Santa Fe.
El animal cayó desmayado en el campo del anfiteatro y se creyó en un principio que se había desmayado, pero luego se constató que falleció prácticamente en el acto, porque resultó desnucada por los movimientos bruscos, típicos de la jineteada.
A pesar del infortunio, la competencia continuó como estaba previsto, al igual que la grilla artística sobre el escenario. La figura principal fue Jorge Rojas.
Sin embargo, la muerte de la yegua causó polémica, ya que la presidenta de la Fundación en Defensa y Protección de Animales, Laura Baggio, aclaró que este tipo de espectáculos incumple la ley 14.346, conocida como Ley Sarmiento, que prohíbe “realizar actos públicos o privados de riñas de animales corridas de toros, novilladas y parodias que los mate, hiera u hostilice”.
Consecuentemente la fundación anunció que irá a la justicia, aunque reconoció: “Es muy difícil cualquier medida contra el festival ya que se mueven muchos intereses económicos alrededor de este espectáculo”, agregó Baggio.
“Hace un tiempo que murió otro caballo que se había desbocado y chocó contra la valla que separa la doma de la gente”, recordó.
Baggio expresó su repudio al maltrato que sufren los caballos en la doma. “Los animales son sometidos a maltrato antes de ser atados al palenque y son hostigados en pos de lograr un buen espectáculo”, manifestó.
